Estando lejos de casa, he aprendido a
valorar más lo avanzada que está la tecnología. Me puedo comunicar de manera
gratuita a través de las diversas herramientas que hay en internet: emails,
facebook, magicjack, Skype, etc. Hay facilidad de enviar mensajes instantáneos
o hacer llamadas y sentir la cercanía de aquellos que están lejos.
El otro día estaba hablando con Luis sobre
renovar la mente y de repente dice : [es cuestión de cambiar el “headset"],
pero en realidad quiso decir el “mindset” (la mentalidad). Me pareció tan cómico
porque el trabaja en IT y eso reflejó el grado de compromiso que tiene con su
trabajo. Piensa en eso hasta en su subconsciente. En el trabajo brinda
servicios a empresas de call center, entre otros tipos de outsourcing, y está
involucrado en temas de headsets casi a diario.
Al principio solo fue una confusión
chistosa, pero analizando mas profundamente, decir que es cuestión de cambiar
el headset es una gran ilustración acerca de lo importante que es cambiar la
mentalidad. Cambiar el headset es necesario de vez en cuando para que las
llamadas sean mas claras. Si nuestro headset es de mala calidad, pueden haber
ruidos innecesarios que causen interferencia o incluso escuchar las voces de
manera entrecortada. Si pensamos en lo que escuchamos de nuestra voz interior a
diario, notaremos que hay pensamientos que ocasionan interferencia para
alcanzar nuestras metas o para cumplir el propósito que Dios tiene para
nuestras vidas. Al cotizar headsets hay que tomar en cuenta también la
calidad del producto y no solo basarse en el precio. ¿Alguna vez has pensado en
la calidad de tus pensamientos? En lo personal, tener un buen headset me ayudaría
a mejorar la calidad de las llamadas cuando trato de comunicarme a casa y de
igual manera, cambiar la forma de pensar me ayudaría a mejorar la calidad del
mensaje cuando me comunico, a construir relaciones fuertes y duraderas y a
mejorar mi calidad de vida en general.
Algunos pensamientos que pueden "
interferir" son:
-No puedo
-Me siento solo
-Me deprimo
-No puedo con mi enfermedad
-¿Por qué a mi?
-Mi situación es demasiado difícil
Si te identificas con alguno de los
pensamientos anteriores, Te invito a que te pongas hoy "el headset del
cielo", un nuevo auricular de la mejor calidad que existe para que
escuches con claridad lo que Dios te quiere decir. Cambia tu mentalidad y
sintoniza la voz de Dios.
Dios te dice:
-Todo lo puedes... (Filipenses 4:13)
-Yo estoy contigo... (Génesis 28:15a)
-Te daré sabiduría, ciencia y GOZO...
(Eclesiastes 2:26)
-Por mis llagas has sido sanado...(Isaías
53:5)
-Todas las cosas te ayudan a bien...
(Romanos 8:28)
-Te daré una carga ligera (Mateo 11:30)
Romanos 12:1 dice
“No os
conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de
vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios,
agradable y perfecta.”
Según el laboratorio de neuro-imágenes de
UCLA, las personas tienen un promedio de 70,000 pensamientos al día. ¿Cuántos
de esos pensamientos invertiste positivamente?, ¿Qué porcentaje fue productivo?
¿Cuánto tiempo invertiste en pensamientos que te atan al pasado, al pecado, o a
las circunstancias?
No dejes que pensamientos negativos te
detengan o te distraigan a modo de ser interferencia entre tu propósito y tu
destino. Renueva tu mente, renueva tu entendimiento. Tampoco pretendas que Dios
revelará cual es tu propósito si sigues ligado a viejas maneras de pensar,
necesitas renovar tu entendimiento para comprobar la voluntad de Dios. Comienza
a dirigir tus pensamientos hacia lo que Dios quiere que haya en tu mente:
En
esto pensad
Filipenses
4:8 “Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero,
todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de
buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.”
Confesión de Fe
Si te identificas con esta palabra, y tienes
muchas preocupaciones o pensamientos negativos que te agobian, te invito a que
cambies el headset y repitas esta oración con todo tu corazón: (tu vida no volverá
a ser igual)
Padre Celestial, te pido perdón por mis
pecados, hoy decido dejar atrás el pasado, no pecar más y cambiar la vieja
forma de pensar. Reconozco que Jesús es Mi Salvador quien murió, llevo' todas
mis cargas y resucitó, ascendiendo al Trono de Dios y dejando al Espíritu
Santo. Decido sumergirme en Tu Presencia para que Tu Santo Espíritu guie mi
caminar y mi manera de pensar. A partir de hoy, Decido pensar como Tú piensas. Amén.